Entrevista con las hermanas sobre la comunidad LGBT+

 

Autores: Mia Mendivil, Abigail Carmona, Maira Micol Pérez del Llano, Sofía Orellana

El 23 de mayo de 2022, alumnos de 3B realizaron una nota sobre la comunidad lgbt+ y su inclusión en los colegios, en esta alumnos de la institución brindaban su opinión diciendo que tan cómodos se sentían hablando de estos temas dentro del colegio (https://lavozescolarmonte.blogspot.com/2022/05/comunidad-lgbt-que-dificultades-que.html).

La nota llego a las hermanas y nos ofrecieron hacerles una entrevista para que nos cuenten su opinión. A continuación, las preguntas que le realizamos a la hermana Debora.

LVE: ¿Qué opinas acerca de esta comunidad?

Hermana Debora: Mi opinión, se basa en lo que el catecismo de la Iglesia Católica enseña en el n° 2358, dice que los católicos están llamados a tratar a la persona homosexual con “respeto, compasión y delicadeza”.

Dentro de la iglesia hay personas lgbt, hacen parte de ella, por lo tanto, nuestra manera de relacionarse debe ser dentro de estas actitudes.

LVE: ¿Cuál es tu opinión sobre que las mayorías de las personas piensan que las personas religiosas no tienen un buen pensamiento sobre gente que pertenece a la comunidad lgbt?

Hermana Debora: Creo que es en base al imaginario social que, a lo largo de los años se fue construyendo. Vivimos en una sociedad que “confirma” corrientes por el actuar de algunas personas. Es lo que la gran mayoría piensa, pero es consecuencia de la construcción que se realizó. Es verdad que puede haber personas que actúen de esa manera, como dicen ustedes “no tienen un buen pensamiento”. Su postura es respetable, lo que no sería lo correcto es que a raíz de esos pensamientos realicen actos violentos, dañando al prójimo.

Pero hay otras personas que optan por acompañar desde otro lugar. A nivel de mi familia religiosa tenemos una misión llamada “OASIS MADRE CLELIA” que se encarga de acompañarlos, la misma se encuentra en Italia, como así también a nivel de nuestro país, en la provincia de Neuquén, está la Hermana Mónica Astorga que tiene una pastoral que acompaña estas realidades. Comparto estos dos proyectos a modo de ejemplo, ya que, a nivel de Iglesia, existen muchas propuestas para acompañar estas realidades.

Creo que con el correr de los años, este pensamiento se ira modificando, nuestra misión en la actualidad es ser buenos samaritanos.

LVE: ¿Qué pensas acerca de que hay alumnos que no se sienten cómodos hablando de este tema en la escuela?

Hermana Debora: Me parece que su actitud, debe ser en sintonía con lo que comparto en la segunda respuesta, ese imaginario social que se construyó y no se modifica de un día para el otro. Estoy convencida que el dialogo, la escucha atenta es el camino para crear puentes. Dentro de esa dinámica, no siempre estaremos de acuerdo, pero si llegar a escuchar y respetar las opiniones de los demás.

El saber dialogar es un arte, no se logra fácilmente y se ve a diario en el colegio, cuando nos cuesta definir qué buzo usaremos para nuestro año de egresados, el ponernos de acuerdo en las actividades a realizar, definir un horario. A nivel mundial, la guerra que estamos viviendo en algunos países, la desigualdad de oportunidades. A nivel familiar, cuando los hijos no se sienten escuchados por sus padres, y cuando los padres sienten que sus hijos no los escuchan.

En el diálogo, se trata de recoger algo de la experiencia y de la perspectiva del otro, pero eso no significa perder mi identidad.

Porque también mi identidad es mi aporte, es mi don para los otros. Si no hay, identidades claras; no hay conflicto, pero tampoco hay vida, todo es cascara vacía. Por eso, no es sano huir de los conflictos, o ignorarlos. Hace alta aceptarlos y sufrirlos hasta el fondo, nunca esconderlos. Pero siempre con el ideal de resolverlos, de lograr armonizar las diferencias.  De dos cosas distintas se puede hacer nacer una síntesis que nos supere y nos mejore a los dos, aunque los dos tengamos que renunciar a algo. Siempre hay que apuntar a algo nuevo donde se superen las tensiones violentas y los intereses cerrados.

Me gusta mucho la expresión del Papa Francisco, el habla de la “cultura del encuentro”. La palabra “cultura” que ha penetrado en las entrañas del pueblo. Si hablamos de una determinada “cultura” en el pueblo, entonces eso es más que una idea o que algo hecho por conveniencia. Cuando se vuelve cultura, se ha convertido en una “pasión” compartida, en unas ganas, en un entusiasmo y finalmente en un estilo de vida. Significa que, como comunidad nos apasiona el objetivo de encontrarnos, de buscar puntos de contacto, de tender puentes.

LVE: ¿Si un alumno se dirige a ustedes con la queja de que un profesor lo está discriminando, de qué forma tratarías este problema?

Hermana Debora: El primer paso es escuchar al alumno, y en segundo lugar escuchar al docente, ambos tendrán sus argumentos que son respetables.

Luego indagar si hubo una discriminación, ver por qué fue motivada, para buscar luego la solución. No debemos bajo ningún motivo, discriminar a nadie, ya sea por su nacionalidad, creencias, aspecto físico, maneras de pensar, etc.

Es un desafío constante, siempre estamos en situación de discriminación o rechazo, y me refiero a cosas “pequeñas” como a situaciones “grandes”. Lamentablemente, estamos atravesados por esas actitudes que entorpecen ver en el otro a un hermano en Cristo.

Debemos ser constructores de la paz, y esto es muy trabajoso, es lo que Madre Clelia soñaba y es lo que deseamos para nuestros alumnos. Prestemos atención a esto que dice el Papa Francisco: "Aun las personas que pueden ser cuestionadas por sus errores, tienen algo que aportar que no debe perderse" (Evangelii Gaudium  236), y tomando el ejemplo que me das, aplico las palabras del Papa, tanto al alumno como al profesor y a toda la comunidad en general.

En todo lugar, aprendamos a ser puentes, no muros.